Al príncipe vinotinto por su cumpleaños

Hace un año hoy afinaba detalles de tu regalo de cumpleaños, y sin darme cuenta hoy afiné detalles del regalo de tu cumple de este año, y aunque con intenciones y sin el tiempo, trataré de regalarte lo que pediste pero también lo quiero regalarte, porque… bueno ya tu me conoces, soy terca y ni aun tus ruegos más dulces me harán desistir de lo que siento está bien.

¿Y lo peor de todo? Siento que me quedo corta, que te regalaría un cupón ganador de esa lotería de NYC y me escaparía para hacerte porras y aún si pudiera hacerlo, me quedaría corta, porque tu cumple es para mí una celebración, porque unas décadas atrás papa Dios te puso en el mundo y el universo se conjugó en una serie de eventos que pienso, rebobino y aun no me creo que propiciaron que te tropezaras conmigo; y como dar gracias es poco para lo que me das, darte un presente es mi forma de hacerte saber que celebro que Dios te de un año más de vida.

Es lindo que haya sentido hoy los mismos saltos en la panza que sentí hace un año con el stress de tu regalo, el año pasado sabía que quería y este también pero mi obsesión por el más mínimo detalle hace que la tarea me descontrole los nervios y me quede sonreída todo el día con la satisfacción de una tarea bien hecha, ahora falta saber que la tarea te guste, al menos espero que un poquito.

Con o sin que fuera tu intención, me has enseñado a valorar la felicidad por lo que es, sin aditamentos, natural, espontánea, sincera, plena y aunque se construye de pequeños momentos, tu dulzura la ha hecho atemporal. Aún si el mundo me desvaneciera el anhelo de futuro, la felicidad que he sentido hasta hoy me dará motivos para sonreír aunque yo para ti no pueda ser más ese motivo, pero nuevamente gracias por hacer que mi realidad sea otra, que a pesar que no pueda poner una etiqueta de para siempre, no siento que la necesite, ya no necesito de eso, porque te tengo y tu eres mi mejor regalo, mi motivo, mi alegría, mi sonrisa y mi picardía, quien me escucha me comprende me consiente y me aconseja.

Gracias por cumplir con las expectativas de la lista y por excederte con creces, espero que este feliz cumpleaños sea otro más de muchos contigo.

Por favor no digas que metiste la pata

Lo que sigue no es apto para sensibles, si te consideras uno, mejor no sigas leyendo

No insultes mi inteligencia mujer del siglo XXI, no me salgas con que metiste la pata  y estás embarazada, eso puede que le haya funcionado a nuestras madres o que en su caso no les haya quedado de otras, tal vez sirva en las novelas mayameras mexicanas y afines que persisten en reflejar a la mujer como una IDIOTA, pero tú por favor que sabes leer, tienes algo de educación, te pintas el cabello, hace dieta, tienes un celular, sabes manejar un computador y navegas por internet hasta llegar hasta este artículo cuando pienses en usar la frasecita al menos ten la certeza que hay alguien en el mundo que te considera tonta por hacerlo.

Eres joven, te consideras y te ves linda, y además estás en la etapa de besar, salir y tontear con varios sapos antes de decidirte o conseguirte a tu príncipe azul. Ahora digamos que el tontear quiere pasar a encuentro s sudorosos, cosa que también se vale, porque hay sapos de sapos no?.. Entonces vienen los siguientes escenarios:

1.        Usaste preservativo (bravo por ti, escogiste el anticonceptivo que te protege de ETS)

2.        No usaste preservativo pero estas tomando pastillas anticonceptivos (no te aplaudo de pie pero igual bien por ti, estas pensando en tu futuro)

3.        No usaste preservativo ni estas en ningún tratamiento anticonceptivo (muy mal eh! Aunque muy factible)

Los escenarios 1 y 2 no deberían siquiera darse por aludidas en estas líneas, así que sigan (sin abusar de la probadera de sapos) con su técnica. Esto se extiende a partir del escenario número 3, léase, la fémina que ha mantenido coito sin protección de ningún tipo. Bueno ok, todos tenemos derecho a un momento de locura irresponsable, lo menos que esperaría es que al menos te suceda con alguien con quien sepas CON CERTEZA que no te contagiará nada más que el bostezo, pero lo que no te permito es que me salgas unos dos meses después con un “Marica metí la pata” o peor “Fulanito me embarazó”. A ti y a todas las mujeres que por una causa menos divertida se ven ante una experiencia de sexo sin protección existe algo que se llama Anticonceptivo de Emergencia, puedes usarlo hasta 72 horas después del encuentro sexual, en cualquier farmacia te pueden suministrar sin necesidad de prescripción médica el que tengan en existencia, de acuerdo al producto, tendrás las indicaciones de administración, así que no hay excusas. No tienes por qué convertirte en una asesina y abortar (si, ya se, tengo una fuerte opinión al respecto) pero tampoco tienes que ser una madre sin presupuesto ni planes ni padre.

Habiéndome sacado esto del pecho puedo continuar feliz, y cada vez que alguna tonta me salga con la frase la enviaré a leer este post, espero que puedan leerlo dentro de las 72 horas, y una última cosa, que la irresponsabilidad en su vida sexual no sea el hábito

Postura religiosa parcializada o… mi polémica visión del criterio de la Iglesia sobre el SIDA.

Humanizar el sida… leí estas palabras entre el cúmulo de artículos que se consiguen sobre el papa Benedicto XVI sobre el uso del condón en su libro la luz del mundo (aquí el link más completo que conseguí). Que más humano que Virus de Inmunodeficiencia HUMANA. It doesn’t get more human than that, pero debo reconocer que es un paso gigante que la iglesia católica se haya pronunciado al respecto de una manera un poco más realista al respecto. Ni siquiera lo etiquetare como algo de mente abierta ni mucho menos porque estaría vanagloriando lo que aun veo como imposible.

De cualquier manera, que el Clero permita el uso del condón o profiláctico para coadyuvar a la no propagación del virus esta muy bien, considerando los tiempos que corren. Y ya sé que esta permisividad es solo a quienes ejercen la profesión de la prostitución pero es una luz al final del túnel para muchos hombres y mujeres forzados a prostituirse con católicos de apariencia que argumentan no usar el condón porque la Iglesia lo prohíbe. Más aún, pensando en los años por venir, me entra un fresquito pensar que podremos callarle la boca a los curas dogmáticos que aun plagan muchas de nuestras iglesias, so good one Ratzinger, es sólo que yo, como joven, pido mas…

Quisiera el uso obligatorio de preservativos, quisiera que de obligatorio se convirtiera en algo tan natural que ya no haga horrorizar a padres, madres y mojigatos, quiero que sea tan natural su uso que lo “normal” sea horrorizarse si no lo usas. Ciertamente ya muchos de mi generación de los 90´s estamos más habituados a su presencia en billeteras, monederos, carteras y guanteras de vehículos pero mientras me siga tropezando con amigas mojigatas que se espantan, machitos mal enfocados que si lo usan no sienten nada, y hombres y mujeres que simplemente se escondan tras la falacia de “eso a mi no me pasa”, mi anhelo por que este tabú sea la regla persistirá.

Mientras escribo estas líneas me saltan interrogantes que van más rápido que mis dedos, y eso es bastante decir, pero ¿qué pasa con esa esposa católica devota, entregada a las beneficencias, casada desde hace décadas con su amantísimo y fiel esposo, que en un infortunio en su ayudar al prójimo se contagió del virus por un objeto infectado, que la contaminó por culpa de esa cortada en la mano que se hizo mientras preparaba la comida para esa comunidad de bajos recursos? ¿le permitirá esa Iglesia en la que tanto ella cree, usar un preservativo para no contagiar a su esposo? ¿y qué pasa con el odontólogo/médico que se contagió mientras cursaba la rural (requisito obligatorio al menos en mi país para que los profesionales de la salud se reciban) y que no tuvo acceso al kit de medicamentos de emergencia ante contagio porque está en un pueblo casi incomunicado y en la medicatura rural no había? ¿tendrá ese profesional de salud que privarse de una sana vida en pareja porque en su frente y en su torrente sanguíneo esta tatuado el VIH?. El planteamiento de que la excepción de su uso solo para quienes ejercen la prostitución no solo me resulta denigrante y discriminatorio, sino que insultante respecto a personas que con virtud, oportunidades y voluntad de ayuda se tropiezan con la desdicha de contraer un virus que aun hoy es incurable.

Es mucha la tela que cortar, muchos los grupos de discusión que se seguirán formando al respecto, solo puedo esperar por el cambio de conciencia en todos, creo que debemos empezar por entender que el contagio del Virus de Inmunodeficiencia Humano y el padecimiento del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida no solo proviene del intercambio sexual consensual e irresponsable. Empecemos por dejar de etiquetar.